Entonces su colega nos llama para ver a mi esposa, mi esposa le responde que le gustaría algo en particular, la semana siguiente la lleva al gimnasio de un amigo, eran las 11 de la mañana y solo había unas cuantas viejitas en el gimnasio. la sala de al lado para una clase que en cualquier caso iba a los vestuarios que estaban en la puerta al lado de la estación de levantamiento de pesas que en cambio habría abierto al mediodía