Un ángel encontrado en el tren. Una mujer madura con un físico explosivo y una mente brillante. Charlamos amenamente durante una hora. Era evidente que la atracción era mutua. Me dijo claramente que, tras una amarga decepción amorosa, busca una relación seria. Quizás nos volvamos a ver, quizás no. Le pregunté si me dejaría una foto de recuerdo y un contacto. ¡Listo! Mientras tanto, dime si se lo merecía 😉