Sé que soy todavía y siempre un tercero, no tengo otras ambiciones, sé lo que puedo representar, sé que soy sólo un instrumento, inicio de equilibrio e investigación y permanencia en la pareja, como debe ser. . La mía es una investigación y una propuesta clara, clara, inequívoca: poseerte anovaginalmente... ¡No soy la vida cotidiana, atrévete!