Harás que tu esposa se arrodille entre mis muslos, en cuclillas con el culo sobre los talones, desnuda con solo un par de tacones altos en los pies, te agacharás detrás de ella, recogerás su cabello con tus manos y lo sujetarás, para que tu El amor podrá chupar mi gran sombrero y lamer mis bolas con calma.