Luna llena. Hay momentos que yo llamo momentos de entrega, cuando una mujer nos permite mirarla con ojos diferentes a los de un amante o una pareja. Son los ojos de un fotógrafo o, mucho más sencillamente, son los ojos de quien podrá mirarlo en fotos, más tarde y en otro lugar. Pero el momento y el recuerdo de ella para el fotógrafo estarán para siempre en esa habitación, y en ningún otro lugar.