Mi esposa asistió a un grupo 
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La Esposa Ofrecida


Mi esposa asistió a un grupo Scout durante muchos años. Mis suegros eligieron un grupo exclusivamente femenino para ella porque no querían que su sincera hija fuera acosada por niños mientras acampaba en las montañas. Pero lo que no sabían es que los líderes del grupo escondían detrás de su respetable fachada a dos amantes de los juegos sáficos en los que les encantaba involucrar a los jóvenes scouts. Durante un campamento de verano acamparon a varios kilómetros del pueblo más cercano en un claro adyacente a un río donde solían lavarse por la mañana. No pasó mucho tiempo antes de que llegara a la ciudad la noticia de que se podían ver chicas jóvenes bañándose desnudas en el río, lo que atrajo el interés de los mirones locales. Mi esposa fue la primera en ver a un hombre escondido detrás de los árboles que las espiaba mientras todas estaban desnudas y jugaban felices en el río, salpicándose con esa agua helada que endurecía los pezones de sus pechos inmaduros. Debió habérselo dicho a los encargados, pero la idea de que ese hombre la espiara la excitó y no dijo nada. Ya llevaban más de diez días en ese campamento y mi esposa, que ya extrañaba al hombre, decidió sin siquiera verlo bien que se dejaría follar por ese hombre. Al día siguiente, cuando sus amigas aún dormían, fue sola al río y esperando que el voyeur fuera un madrugador. Después de desnudarse por completo, comenzó a caminar por la orilla del río en dirección a los árboles donde el día anterior había visto la silueta del voyeur. Un ruido la hizo girar y lo vio... era un hombre maduro, alto y musculoso, que a unos metros de ella la miraba con deseo pero sin decir ni hacer nada. Seguramente su apariencia que la hacía parecer menor a su ya corta edad hizo que ese hombre fuera cauteloso, pero ella tenía las ganas y no quería esperar más. Ella se acercó a él y después de acariciar la bragueta de su pantalón hinchada de excitación, bajó la cremallera y liberó su polla hinchada de deseo. Se arrodilló frente a él y lo chupó con tal ardor que a los pocos minutos él se corrió en su boca. Se lo tragó todo y empezó a chuparlo de nuevo, ansiosa por devolverle el vigor necesario para ser penetrado. Pero la llegada de las otras chicas y los líderes puso fin al juego y aquel hombre se escapó desapareciendo entre los árboles.....

Visto: 111 veces Comentarios 0 Date: 27-10-2024 17:34:33

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